Hoy será presentado oficialmente el libro “Capto impresiones, Atlas Fotográfico – Virus 1980/1987”, ópera prima de la talentosa fotógrafa Silvia Bordoni
El libro lanzado por “Zorn Books Switzerland”, factoría artística del productor y empresario Robert Bindon, será oficializado ante medios, varias figuras invitadas y público en general en el “Museo del libro y de la Lengua”, en la zona de Recoleta.
Una obra gráfica muy esperada por los amantes de la música. El libro de la fotógrafa Silvia Bordoni será presentado esta tarde en un prestigioso lugar del barrio de Recoleta.
(Capital Federal – Miércoles 29 de Marzo de 2023) A contracara de varias editoriales que en los últimos meses vienen publicando libros con baja calidad de papel, nula presencia de imágenes y un valor desmesurado en esa relaciòn costo final-producto, el multimedios “Zorn Books Switzerland” oficializará el esperado libro “Capto impresiones, Atlas Fotográfico – Virus 1980/1987”, ópera prima literaria de la notable retratista platense Silvia Bordón, un material que reúne en 114 páginas unas 160 fotos, las cuales jamás fueron publicadas o conocidas en otros soportes o formatos. La conocida fotógrafa argentina venía hace varios años preparando este material, el cual finalmente quedó terminado a fines del 2022, pero el grupo editorial que lanza esta espectacular producción prefirió oficializarlo muy cerca de la nueva edición de la Feria del Libro en la Rural, un trabajo que sobresaldrá dentro de las novedades de la presente temporada. La presentación del libro ocurrirá en el «Museo del Libro y la Lengua», ubicado en la Avenida Las Heras 2555 a las 18 horas. Un par de días antes de este destacado estreno, la experimentada profesional recibió a Noticias 1440 en su casa de City Bell, distendida tarde donde respondió las siguientes consultas:
¿Porqué el título de tu Atlas Fotográfico es una letra de un grupo musical? Silvia Bordoni: “Capto impresiones” es parte de la letra de “Superficies de Placer”, es un disco por las vivencias en Río de Janeiro que me partió al medio, realmente me lloraba todo. Los tiempos cambiaron, no estoy acompañando a Mario en esta gira actual de Virus, cuando pueda lo voy a acompañar pero nó como antes , no es mi función, prefiero estar desde otro lugar. Ya no es la misma relación con la gente que está, no somos los mismos, cambiaron los vínculos. Mario está en esta etapa, pero tampoco se siente parte total de este proyecto musical, fue parte en aquella época en la que hace referencia el libro con sus imágenes.
«Capto Impresiones, Atlas Fotográfico Virus 1980-1987» se lanza hoy. Casi 160 fotos jamás publicadas integran una excelsa colección de imágenes sobre el grupo oriundo de la ciudad de las diagonales.
¿Cómo ordenaste el material seleccionado que iríìa en tu primer libro de fotos? Silvia Bordoni: En el capítulo 1 hay varias tomas fotográficas realizadas en 1987 en Río de Janeiro durante la grabación de Superficies de Placer, en el segundo capítulo aparecen las de la presentación de Agujero Interior (1983), el capítulo número 3 está abocado a las tomas casuales en diversos camarines, mientras que el cuarto capítulo está abocado a las tomas del show en el teatro Astros para la presentación del disco Relax. Ubiqué en el capítulo 5 diferentes fotos de Federico Moura de 1983, 1985 y 1987, mientras que el sexto es sobre lo ocurrido en la presentación de Locura en el Opera en 1985. El último capítulo es la presentación de Superficies de Placer en Obras durante 1987, me parece en perspectiva que ese era el orden que quería aplicarle a esta compilación de imágenes.
No fuíste por el camino tradicional de ubicarlas por fecha de realización. Silvia Bordoni: Nó, el atlas es una organización particular, -en este caso de imágenes-, donde cada espectador o lector arma su propio relato a partir de las fotografías que son las que van escribiendo la historia. Le lectura del atlas es abierta, puede modificarse todo el tiempo, cada imagen nos lleva a otras nuevas de naturaleza diferente que son las que nos permiten bucear y experimentar la obra. Está basado en el concepto del Atlas de Richter, sobre el que hice una maestría en curaduría. Me pareció muy interesante y a partir de allí sentí que por ese lado el proyecto estaba resuelto.
Una postal de aquellos años en una selfie analógica. Silvia Bordoni, esposa del talentoso baterista Mario Serra, compiló las mejores imágenes del período 1980 – 1987 en un libro seductor y muy entretenido.
¿Cómo arrancaste tu vida fotográfica? Silvia Bordoni: Mi primer cámara la tuve en 1980, recuerdo que viajamos a Nueva York con Mario Serra, Julio Moura y Quique Mugetti, ellos fueron a comprar varios equipos y de hecho adquirieron una porta-estudio de seis canales. Ahí me compré mi primer cámara Pentax, venía haciendo fotos y además había estudiado en el Bellas Artes la carrera de diseño en la que teníamos fotografía, pero ahí lo hacíamos con cámaras prestadas. Era una cámara K-1000, divina. Le fuí incorporado lentes de a poco, un 50 milímetros, luego un tele y después un gran angular. Ahí empecé a sacar fotos, en los años 80-81, quería retomar la carrera de diseño, en ese tiempo ya vivíamos con Mario y había nacido María, mi primera hija.
¿Cómo son los recuerdos de esos tiempos? Silvia Bordoni: Epoca difícil, estaba el Proceso Militar en el poder, justo no aparecían mis papeles en la universidad y me rayé, un día viajé a Buenos Aires para solucionarlo. En ese momento hacía ropa, vendía, tenia otra profesión, recuerdo que ví numerosos carteles de la Escuela Panamericana de Arte, entonces empecé a estudiar fotografía, llegó el momento de armar el laboratorio y hacer mis fotos. Coincide justo con el tiempo en que empieza Virus como grupo. Cuando podía lo acompañaba a a Mario a los shows y hacía fotos, nunca más me despegué de la cámara. Soy bastante tímida y vergonzosa, mi actitud era estar escondida, no abusaba de la situación.
La autora y su primer trabajo en la órbita literaria. El esperado libro de Silvia Bordoni aparece publicado por el sello «Zorn Records», editorial propiedad del exitoso empresario internacional Robert Bindon.
¿Cómo hacías tus imágenes y qué relación tuviste con Federico Moura? Silvia Bordoni: Lo conocía a Federico, era alguien muy particular, exigente, sabía que no tenía que joder porque al primer ruido me volaba. No le hice producciones fotográficas, era solo material para el entorno, las fotos le llegaban a través de Fernando Bustillo, el asistente, aparte me gustaba ser una persona colateral a lo que sucedía con la banda. No tenía en ese momento la presión de “tengo de entregar el material”, vivir eso era algo increíble, ir a los shows, todas las puestas visuales de Virus tenían realmente mucho laburo, era como que conformábamos una especie de familia, Bustillo, Pancho Luna, colaborábamos, me pedían fotos de los escenarios vacíos, fue una época realmente buenísima, maravillosa. Con Federico hablábamos de cosas más internas, personales y muy relajadas
¿Cómo surge la edición de tu libro ahora a través de la editorial “Zorn Records”? Silvia Bordoni: Bueno en aquellos años me exigía mucho, copiaba algunas cosas, guardé muy bien todos esos negativos, estaba estudiando, tenía todo ese material muy bien guardado, por eso quedó todo ahí sin dañarse. En algún momento me relacioné laboralmente con los Churba, había una tienda en la calle Arenales y aparece Martín Churba, un día charlando me dice que yo tenía estas fotos de Virus y me sugirió de copiar contactos de todo, en ese momento me dijo “con esto tenés que hacer algo”, fue el motor inercial de todo eso. Lo puntual es que tenía los archivos, el productor Robert Bindon vio lo que tenia y le venía tirando material, el quería hacer algo que no llegó a cuajar, pero en uno de los viajes, antes de arrancar la pandemia, 2018 o 2019, me impulsó a hacer un libro, “yo te lo voy a bancar” me dijo, estaba el compromiso de hacer un libro. Nunca había hecho algo así, fue pensar por donde iba a ir, entendí que debía ser solo de lo sucedido con Virus y Robert me acompañó con gran respecto y afecto en la confección final del Atlas Fotográfico.
Federico Moura en sus épocas doradas. El libro de la experimentada retratista Silvia Bordoni propone sumergirse en la intimidad del grupo Virus a través de imágenes muy impactantes.
¿Cómo siguió tu carrera profesional después de la muerte de Federico Moura? Silvia Bordoni: Shockeada. Cuando sucede la muerte de Federico Moura, paré todo lo relacionado con música, al poco tiempo empecé a laburar como reportera gráfica, en aquél tiempo trabajaba como free-lance, después me fui metiendo en la editorial Perfil, estuve “haciendo banco” allí en esa firma hasta que por fin quedé estable. Eso me puso con otra cabeza en la fotografía y lo manejé con calma, el reportero gráfico usualmente no tiene mucho recuerdo, porque cada día hace una cosa distinta, para mí fue un escape, eran notas, notas, cubría algunos shows, pero no era fotógrafa de rock. Al estar en Perfil cambié de equipo, pasé a Nikon, ya era cámara con motor, diapositivas y negativos en esos tiempos, porque en esos años ya no revelaba, no tenía tiempo.
¿Cómo reacciona Mario con las cosas que llevàs a cabo y cómo lo viste evolucionar en su relación con alguien tan especial como Charly García? Silvia Bordoni: Mario no es de mirar las fotos que hago, conmigo era muy “Let It Be”, nos dejamos ser ambos, él ahora no quería ver el proceso de este libro, después lo vio ya terminado y está muy sorprendido, hay testimonios históricos que tienen un valor notable al evocarlos con perspectiva. Mario fue a tocar una vez a La Carlota y una persona me contacta, me manda la foto de la revista Pelo con Virus, que él halló esas fotos, me decía “cómo guardaste todo?”, sabía que había pasión, más allá de los incendios, la inundación, mis archivos fue lo primero que rescate en cada problema que me apareció. Mario en los ‘90s graba con Charly en New York en la mezclas de “Demasiado Ego”, lo convoca a grabar “Anhedonia”. Ahí se genera un vínculo muy especial, fue una época difícil, por un lado muy difícil con lo que sucedía con Virus, por otro lado muy gratificante para Mario artísticamente, era el integrante con más historia del grupo de Charly. Está el recuerdo de Puerto Madero tocando para 300 mil personas, García se dio cuenta en «Buenos Aires Vivo» en Puerto Madero que tenía un enorme público que lo amaba, ahí había buena muy energía, yo estaba sacando fotos, fue algo muy fuerte, haciendo imágenes en la calle con tantas personas. No estaba todo tan construído con las torres de edificios en Puerto Madero, eso lo cubrí para Perfil, era una cobertura especial.
Federico Moura, Celsa Mel Gowland e Isabel de Sebastián en vivo. La publicación del sello «Zorn Records» incluye numerosas fotos de los conciertos de Virus, como por ejemplo esta postal del concierto de «Relax».
Tambièn hiciste recientemente cosas para las estructuras digitales. Silvia Bordoni: Trabajé en una web llamada “Disfrute”, que era como algo comercial, lo hacía con una socia, empecé a hacer contendido, hasta que finalmente surgió el proyecto del libro y me volqué de pleno a esta cuestión, dije “quiero disfrutar”. Es posible que las cosas que hice ameriten un libro, pero el relato de Virus era como muy importante, iba más allá del rock y la música, ahí pasaron cosas muy fuertes, hasta el último día estos músicos recibieron palos y palos de la gente y los críticos. Cuando sos muy amigote de alguien, en ese vinculo se habla de cosas que no las hablás con tu familia, yo con Federico tuve una relación de amigos y era hablar ciertas cosas que eran personales, surgió en este proceso aludir a todas esas cuestiones emocionales, las cosas que me contaba, fue como volver a todo eso.
¿Cómo siguieron las cosas con el grupo despuès del fallecimiento de Federico Moura en diciembre de 1988 y la inminente publicación de un disco donde cambiaron de cantante en medio de los registros? Silvia Bordoni: Bueno, Federico muere en el departamento de la calle Piedras, todos esos días fueron de puro shock. Cuando bajó el dolor, hice fotos de la etapa de “Tierra del Fuego” en el Teatro Coliseo y tambièn cuando ellos tocaron abriéndole a David Bowie en 1990 en la cancha de River. Después surge lo del grupo Aguirre con Marcelo Moura de invitado. Hasta que después en 1994 Marcelo reformula Virus, ahí Mario no fue de la partida, fue un momento muy difícil para Mario, él la pasó realmente muy mal en ese momento, se desconfiguró, la gente le preguntaba a los Virus por Mario, pasar de ser tan cercanos y compartir cosas a no vernos mas, estar casi enojados, Fue algo muy difícil, nos perdimos un montón de cosas, los chicos tuvieron hijos, el contacto se retoma con el CD solista de Marcelo Moura, a Mario le gustó mucho hacer ese disco, pero el álbum no tuvo mucha repercusión, ahí los CDs empezaron el camino de la despedida, paso este proceso, Mario hizo después “Viralizados”, ahí les hice producción para tapa y discos, hicimos un video, muchas fotos de difusión. Hice fotos en mi casa para el disco “7”, era la época de la pandemia, pero seguía ligada a la música, como siempre, poniendo el hombro.
Virus en la época de «Agujero Interior». Mario Serra, Quique Mugetti y Federico Moura en uno de los numerosos recitales de la banda platense con su tercer disco de estudio.
¿Recordás algún hecho especial de esa famosa década con tu debut fotográfico? Silvia Bordoni: Los ‘80s dejan un saldo especial, las imágenes de ese tiempo fueron muy particulares en todo sentido, innovadoras. Estaba el cambio y la necesidad de modificar las cosas, la necesidad de volver. Me acuerdo que fuímos en diciembre de 1980 a ver “The Police”, estaba embarazadísima de mi hija, llegué a la cola en el estadio Obras, miré y estaba toda la gente superlookeada, muy producida, las personas tenían necesidad de expresarse con eso, sin duda los ‘80s marcan un cambio, veníamos de una época muy oscura y estaban los sobrevivientes. Fuímos con Julio y Marcelo Moura, fue un flash, ver a “The Police” fue algo muy fuerte, los habíamos escuchado en Nueva York, me acuerdo esa escena del policía que quiso sacar a una chica del show y Andy Summers lo pateò para que la dejara en paz, los músicos ingleses estuvieron a punto de terminar la noche detenidos.
¿Cómo recordás tus producciones fotográficas para la editorial Perfil? Silvia Bordoni: Hacíamos fotos en las casas de los personajes, tenías que ser muy creativa, hallabas situaciones divinas y otras bastante difíciles, trabajé en Perfil desde 1992 hasta el 2015, en el medio también hice cosas para revistas del grupo La Nación, en Perfil hacía muchos, muchos personajes, luego seguí muy ligada a las revistas femeninas, como por ejemplo “Luz”. A esta última lamentablemente la destrozaron, en esa época ya sacaba en digital, tuve que hacer el cambio a digital, lo primero que hice en ese formato fue una cobertura de temporada en Mar del Plata, la cámara era un paty, “con esto no voy a poder, me mato”decía a cada instante.
Una fotógrafa muy conocida en la industria noticiosa. Silvia Bordoni se desempeñó en la Editorial Perfil, el grupo de revistas de La Nación y también incursionó en la órbita digital con su destacada web «Disfrute Com».
Hace menos de diez años paraste con tu profesión y arrancaste el proceso de tu libro. Silvia Bordoni: En un momento las coberturas, ya con cámara digital, me exigían más de lo habitual, todo se volvió un trabajo físico. Cuando pude tomar distancia advertí que estaba muy contaminada, seguía con la misma cabeza en estos últimos tiempos, pero en la pandemia logré purificar todo y soltar bastante la cuestión editorial. Ahora soy de sacar fotos para mí, me encanta viajar, amo la fotografía callejera, seguir siendo espía con mi lente, amo la fotografía a pesar que estamos grandes y con toda esta mochila encima, tengo proyectos y quiero seguir haciendo fotos, nunca dejé de sacar. Atravesar la pandemia en City Bell estuvo buena, fue bajar los decibeles, lo que sí complicaba las cosas era la incertidumbre de lo que pasaba, el cagazo ante lo inesperado, pero sin la necesidad imperiosa de salir a laburar porque nunca me clasificaron como fotógrafa de rock. No era como Nora Lezano, que hizo foco en eso, me diversifiqué con Perfil y otras cosas, también acompañando a Mario en todos sus proyectos musicales.
¿Cómo ves ese progreso técnico y la degradación de esta especial profesión? Silvia Bordoni: Leía hace poco a David Lynch, él dice que las fotos de celular no son fotografías, coincido totalmente con él, para mí la fotografía es otra cosa, tengo una “Power Shot Cannon”, saco a una flor o una hormiga, son motivos para hacer imágenes, me parece que a una foto de Instagram le cuesta mucho emocionar. Instagram es una estructura medio copada, pero hay imágenes que están sacadas con cámaras profesionales y después las suben a esa red. En definitiva, la verdadera fotografía es con cámara. En la actualidad, las cámaras de los celulares le permiten ser fotógrafo a cualquiera, pero todo lo que hacen no es fotografía artística, sin dudas.